miércoles, 31 de agosto de 2011

Que la enseñe si puede


Su mirada se ha cansado de tanto observar
esos barrotes ante sí, en desfile incesante,
que nada más podría entrar ya en ella.
Le parece que sólo hay miles de barrotes
y que detrás de ellos ningún mundo existe.
(...)
Rilke.


A los que se quedaron dormidos en el nunca,
a los que sueñan sus verdades y se las niegan,
a los que tienen mucho miedo,
y lloran por cualquier cosa
y se ocultan la cara de vergüenza.
A los tímidos,
a los solos, a los raros,
a los que dudan y dudan
y les llaman inmaduros, débiles,
A los que duermen en la fría cama del psiquiátrico,
a las madres que cogen la mano de su hijo ingresado,
os digo que no nos vendan verdades, que la verdad no existe,
la verdad y la razón son creaciones del hombre
para doler, para medir,
Hay que luchar contra el silencio,
y la ignorancia,
no somos enfermos.
Quién tiene la verdad absoluta, la realidad absoluta,
que la muestre, que la enseñe si puede,
es mentira, mentira, no existe.
A los que llevan cicatrices de haberse rajado las venas,
a los que consiguieron no rajárselas,
a los que les paraliza la angustia,
les paraliza para ser, amar , soñar,
a los que llaman vagos, idiotas, locos, débiles.
No escuchéis la voz de los que viven solo para tener
A los que, la ansiedad, les hace fumar dos paquetes diarios,
a los que no son sociables, ni aptos, ni lúcidos,
ni extrovertidos, ni empáticos, ni asertivos, ni normales,
a los que nunca superaran un test psicotécnico,
a los que llevan medicación en el bolso y el monedero vacío,
a los que ahora están atados a una cama y no nos oyen,
a los psiquiatras que abrazan a sus pacientes
y pidieron alguna vez consejo a un esquizofrénico,
A los que tenemos certificado de disminución
y leemos a Lorca y a Nietszche y lo que haga falta,
a los que no soportaron el túnel y se fueron para siempre,
a los que atravesamos cada día el túnel
agarrados aunque sea a las paredes negras,
a todos los que saben o quieren escucharnos,
y no se fían sólo de los manuales, libros, tesis,
estudios y estadísticas,
a los psicólogos que dan besos,
A los que hemos pasado ya el infierno y el cielo
y no queremos volver nunca más allí.
A los que roban dolor y devuelven sonrisas, dice Sabina.
Y sobretodo
a todas esas pupilas dilatadas de tanta química
que miran aturdidas y absortas
pero tienen la luz más hermosa.

“Que no existe la locura sino gente que sueña despierta”.

Princesa Inca. Introducción de La mujer precipicio.

Viñeta autor desconocido


sábado, 27 de agosto de 2011

El templo y sus caminos

(…)

Nos duele sostener esa luz tirante y distinta,
esa alucinación que impone al espacio
el unánime miedo de la sombra
y que cesa de golpe
cuando notamos su falsía,
como cesan los sueños
cuando sabemos que soñamos.

Borges

Unas tinieblas que prometen y a veces amenazan abrirse. Y es difícil creer que quien recorre tal camino no se vea acometido por el tempor y un temblor casi paralizantes. Es la luz de un viaje más bien extrahumano, que el hombre emprendía asomándose al lado dé allá, a ese lado al cual se supuso, cada vez con mayor ligereza, que sólo se asoman los místicos. Es la luz que se vislumbra y la luz que acecha, la luz que hiere. La luz que acecha en la inmensidad de un horizonte donde perderse parece inevitable, y que hiere con un rayo que despierta más allá de lo sostenible, llamando a la completa vigilia, ésa donde la mente se incendiaría toda.

María Zambrano: "La respuesta de la Filosofía", en Los bienaventurados, Madrid,
Ed. Siruela, 1990, pp. 80-81

Fotografía Autor desconocido

martes, 23 de agosto de 2011

Aquí está




He hablado así tempranamente, ¿y debo
prevenirme del sol del entusiasmo?
Claudio Rodriguez

(…)

Aquí está

la tácita alegría
de una estruendosa flor
agarrada a lo oscuro de sí misma.

(…)


Felipe Bollaín.

Los gatos han aprendido a abrir el frigorífico.

Fotografía Manuel Dominguez.

lunes, 22 de agosto de 2011

La dama y la muerte.



La mejor preparación para la muerte es la conciencia de vivir teniendo presente que vamos a morir, Que postergar la vida es mal negocio, decir mañana es casarse con el futuro y esas nupcias equivalen a suicidarse en el presente.
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.
Fotograma La dama y la Muerte.

domingo, 14 de agosto de 2011

Saltar


Hay que saltar del corazón al mundo
Hay que construir un poco de infinito para el hombre.

Huidobro.

(...)

No te arredres. La ergástula es oscura,
La firme trama es de incesante hierro,
pero en algún recodo de tu encierro
puede haber una luz, una hendidura.
El camino es fatal como la flecha.
Pero en las grietas está Dios, que acecha.

Jorge Luis Borges

Fotograma Pesepolis.

lunes, 8 de agosto de 2011

Cincelada verso a verso, imán para el recuerdo...


(…)

Así fue: como el viento o el amor.

(...) señalaba
hacia el lugar justo del hombre,
el que rompía sus cadenas, lágrima
a lágrima.

(...)

imán para el recuerdo, testimonio
liberador, inmortalizador.

(...)

(...) Y comprendí.


José Hierro.

Fotograma Caótica Ana.

jueves, 4 de agosto de 2011

Clavarla en el centro de mi vientre.


(…)

El excelso regalo que hago a la humanidad es la absoluta ausencia de moral. Nada me limita. He transgredido todas las leyes; quemo las constituciones y los libros sagrados. Ninguna religión puede abarcarme.

En el fondo del fondo del fondo, nadie habita más profundo que yo. Soy el origen de todos los abismos. El que da vida a las grutas oscuras, conozco el centro en torno al cual giran todas las densidades.

Soy el corruptor de los espíritus vanidosos que se revuelcan en la perfección.

La conciencia asesina de lo perpetuamente efímero. Quién, encerrado en el subterráneo mundo hace temblar la catedral estúpida de la fe.

No me impido imaginar a un profeta a gatas montado por un asno en celo.

Sin embargo, desde lo más hondo de la caverna humana, enciendo la antorcha que organiza las tinieblas.

Lucho por conservar el instinto, para fijarlo como una escultura fluorescente.

Y me quedo ahí, intentando unir todos los segundos unos con otros, detener el flujo del tiempo. Esto es el infierno: el amor total hacia la obra divina que se desvanece.

Quiero engullir esta eternidad, esta gloria imponderable, clavarla en el centro de mi vientre.



Trazos de Jodorowslki.

Fotograma cisne negro.